Conferencia sobre el cambio climático y la gobernancia, 28-29 marzo 2006, Nueva-Zelanda

La conferencia sobre el cambio climático enfocó sobre testimonios científicos y la integración de proyecciones sobre el cambio climático, considerando políticas social y económica y gobernanza.

Las presentaciones de los científicos fueron excelentes, recordándonos, a través de una imagen gráfica, las fluctuaciones de temperatura en la Tierra a lo largo de millones de años, y la subida de temperatura en los últimos 100 años.

En la conferencia se puso de relieve la complejidad de la integración de los ecosistemas existentes en la Tierra y la relación entre la Tierra, el agua y la atmósfera. Al ver este gráfico sobre las variaciones de temperaturas en el superficie de la Tierra, y el desastre que éstas representan para la vida en la Tierra, quise reflejar de nuevo sobre el carácter ilusorio del conocimiento y de la investigación conducidos por la racionalidad, o logos, independientemente de la sabiduría, la emoción, la intuición. La razón está separada de de la relación (relationality).

Un mensaje que resalta de este cambio climático es que la trayectoria del calentamiento indica que no será posible prolongar la vida en la Tierra tal como la conocemos. La conferencia sobre el cambio climático también nos recordó que esa tierra es un sistema, que tal vez será capaz de mudar hacia un nuevo estado. Si nos atrevemos a permitir esa evolución, ¿qué vamos a legar? ¿Será este legado reversible? Y si lo es, ¿tenemos nosotros la voluntad colectiva de actuar así? Junto con una toma de responsabilidades locales y nacionales, una cooperación multilateral es indispensable. Un científico ha propuesto que trabajemos a nivel internacional sobre el atmósfera considerándolo como bien mundial.

El impuesto sobre el carbono que se ha propuesto en Nueva Zelanda como parte de nuestros compromisos de Kyoto se ha abolido. Según el Ministro que asistió a la conferencia, ’no teníamos los votos para aplicarlo’. Puesto que dependemos de un proceso democrático, tenemos la responsabilidad de diseminar información sobre el cambio climático con estrategias de intervención.

Una de las preocupaciones de esta conferencia es la tendencia a adaptarse en lugar de dar remedio a - nuestros sistemas, nuestras políticas y al uso de la energía. El cambio es inevitable, y requerirá adaptación. Pero la adaptación y la invención tecnológica están relacionados al ’crecimiento’ para que el ser humano, las plantas y la vida biológica puedan sobrevivir al proceso de calentamiento, con el sinnúmero de repercusiones en la Tierra que conocemos, y eso no facilita nuestra respuesta a esta nececidad de adaptación.

Las implicaciones en el transporte, la industria, los combustibles, la producción son enormes. Los paradigmas y valores de progreso y crecimiento están profundamente aferrados a un modo de pensar orientado hacia el futuro. Se criticó la teoría económica utilitarista, y hubieron presentaciones sobre la sostentabilidad y procesos del comportamiento humano más holísticos. Algunos dicen que la pobreza es lo más urgente por resolver. Se planteó el desafío de la transformación energética necesaria a nivel de la política personal y pública. Me recuerda eso a los esfuerzos de filosófos para vincular la naturaleza con la cultura, así como a la contribución de las tradiciones indígenas en este esfuerzo.

El cambio climático y el proceso de la Carta de las Responsabilidades Humanas

En la medida que nuestras iniciativas sobre la responsabilidad están concernidas, me parece que un material de información es indispensable. Como lo ha dicho Cécile Sabourin (coordenadora del Comité regional para Canadá), ya existe mucha información disponible, y podríamos trabajar con lo que se ha hecho ya. A veces un nuevo material puede alcanzar a nuevos públicos; por ejemplo, Los Verdes (Greens) publicaron en Nueva Zelanda un nuevo documento para coincidir con la conferencia, y éste recibió un interés inaudito de parte del público (ver articulo Turn down the heat). Producir un folleto es en parte una cuestión de recursos y de prioridades, y parece que esto es parte de una estrategia para una iniciativa responsable para un cambio climático.

Podemos concebir el proyecto de una serie de catálogos sobre el cambio climático que reflejan tanto problemáticas mundiales como información específica a nuestras regiones. Con la Comisión de los Derechos humanos, acabamos de ponernos de acuerdo para organizar una serie de seminarios públicos sobre los derechos y las responsabilidades en el contexto del cambio climático. Este proyecto se lanzará durante la segunda parte del año.