Objetivos y actividades por Amina RACHID | ||
El objetivo para el año 2004 era doble: 1. La realización de un estudio sociológico sobre el sentido de la responsabilidad tal como la percibe, la vive y la practica la población egipcia. 2. La realización de un documental en formato vídeo sobre el mismo tema. Realización de un Estudio sociológico Por razones presupuestarias hemos decidido comenzar por el estudio sociológico. Dentro de ese marco, entrevistamos a alrededor de 300 personas, dentro de las siguientes categorías : 1. La edad : entre 16 y 70 años
Asimismo, atravesando todas estas categorías : estudiantes, militantes de partidos políticos, de sindicatos, de ONGs, grupos de defensa de derechos humanos, centros de investigación, formaciones religiosas (moderadas o fundamentalistas), individuos más o menos ligados a uno u otro de estos grupos y que sólo comparten sus actividades de manera esporádica. Resultados Los principales resultados obtenidos son los siguientes : Nuestra sociedad está en plena crisis. En el contexto de un estado represivo en el cual reinan el favoritismo y el nepotismo y en donde los individuos tienen pocos derechos y muchos deberes, la noción de responsabilidad no queda clara, se confunde a menudo con el deber, incompatible con la idea de una responsabilidad elegida y asumida libremente. La noción más aparente es la que imparte la tradición : el hombre es responsable de ganar el pan para su familia, la mujer es responsable del hogar y de los hijos, vale decir responsabilidades familiares, tanto en la familia nuclear de las ciudades grandes como en la familia extendida en el campo. Los militantes, hombres o mujeres, hablan de la necesidad de un cambio, pero a menudo hay una contradicción entre los discursos progresistas y la práctica cotidiana. Con respecto a la esfera de lo público, el desinterés va en aumento si se compara con períodos de gran movilización y esto se une a la responsabilidad como deber familiar : cuando hay riesgo de represión se evoca la necesidad de no sacrificar a los suyos comprometiéndolos en asuntos cuyas consecuencias pueden ser complicadas. Muchos hablaron de que los tiempos han cambiado : antes uno podía dar la vida por su país, ahora no. Se agrega a esto el amargo sentimiento de una impotencia debida a la dominación del Estado y el servilismo de éste con respecto a las grandes potencias, en particular los Estados Unidos, considerados como responsables de todos los males de la humanidad. Los más ricos se sienten responsables de sus bienes e ignoran por completo sus deberes para con los más necesitados. Las clases medias viven en la angustia de llegar a fin de mes y de la educación de sus hijos. Los más pobres tienen la sensación de que todo los sobrepasa, de que no tienen ningún derecho y que sólo el Estado puede cambiar las cosas, pero que no lo hará. Las ONGs intentan llenar el vacío que se generó entre la gente y los “responsables”, admitiendo que no lo logran. Las prioridades de los militantes son la lucha contra la represión y la defensa de los derechos de los campesinos y obreros a nivel nacional y el rechazo de la ocupación de Irak y la defensa de los derechos de Palestina en el plano internacional. Hemos leído y hecho leer la Carta, la hemos discutido y, en forma general, a la gente más consciente le ha parecido excelente. Pero surgieron algunas reservas. Para algunos, la pregunta era ¿cómo aplicarla, en la medida en que no tenemos las condiciones propicias para poner en práctica ninguna responsabilidad ? La Carta es importante, pero sin los medios para realizar sus objetivos no tendría ningún impacto. Otros temen que en nuestro contexto, en donde la imagen de Occidente es hoy muy negativa, sólo Occidente pueda aprovecharlo.
El estudio será obviamente publicado, pero aún no se ha terminado con el análisis de todas las respuestas. |