Publicado em 19 de janeiro de 2007
Tercer encuentro de migraciones : hacia la integración regional y la responsabilidad de los Estados
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Governança, Direitos humanos, e responsabilidade .
Los inmigrantes ponen a prueba la capacidad democrática de la sociedad chilena | ||
La discriminación a los migrantes por factores asociados a raza, cultura, origen, en la sociedad chilena parece acentuarse en vez de disminuir, según acusan los cientos de personas que a diario ingresan a Chile huyendo de la guerra en Colombia o vienen del Perú, en busca de mejores oportunidades . A la intolerancia y al rechazo le siguen el no reconocimiento de derechos laborales, civiles y sociales de parte de empleadores y agentes de la administración estatal. La existencia de tales conductas las puso de manifiesto el Tercer Encuentro de Migraciones, Integración Regional y Responsabilidad de los Estados, organizado por Corporación Ayun y la Red Chile por las Responsabilidades Humanas, que tuvo un apreciable marco de participación de parlamentarios, representantes de gobierno y de legaciones consulares, de grupos de emigrados e instituciones de derechos humanos vinculadas al tema. _ El encuentro recibió el apoyo del Departamento de Diversidad y No Discriminación de la División de Organizaciones Sociales del Gobierno y de la comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados. La jornada se realizó el 7 de diciembre de 2006 en el Palacio Ariztía, sede de la Cámara de Diputados en Santiago, y contó con la participación del vicepresidente del Senado, Jaime Naranjo, de los legisladores María Antonieta Saá, Ximena Vidal y Tucapel, Jimenez; del Cónsul General del Perú, Marcos Núñez Melgar, del vicecónsul de Bolivia, Miguel Vargas; de Carolina Huatay de la Corporación de Migrantes ProAndes; Blanca Pineda, escritora, representante de los refugiados colombianos en Chile, entre otros. El encuentro dio pleno cumplimiento al propósito y compromiso ético de los organizadores de establecer un diálogo entre la sociedad civil y los agentes de decisión pública, plática destinada a abordar las preocupaciones centrales de la vivencia cotidiana de los migrantes, referidas principalmente a quejas por la burocracia administrativa que obstaculizan el acceso al trabajo y a los servicios de salud, vivienda y educación en desmedro de su situación familiar y personal. Ciudadanos de segunda clase
Ciudadanos de segunda claseLa oleada de inmigrantes desde el Perú a Chile que se originó hace ya una década, aunque ha decrecido en número no se ha detenido y a ella se han incorporado importantes flujos de ciudadanos de Bolivia, Ecuador, Colombia y otros países de la región que generan un éxodo constante de migrantes los cuales se emplean de preferencia en las ciudades fronterizas del norte o del centro del país, Santiago y Valparaíso. Los estudios oficiales indican que se trata de una inmigración de nuevo tipo, en general de mujeres y con motivaciones laborales, que se inserta en ocupaciones de baja calificación, muchas veces concentrados en “bolsones” de pobreza, lo que genera riesgos y vulnerabilidades asociadas a fenómenos propios de la acelerada modernización: racismo, xenofobia, abuso laboral, estigmatización social en medios de comunicación masivos, exclusión educacional, etc. _ Chile cuenta con cerca de 250.000 inmigrantes en su territorio, que constituyen cerca de 2% de su población total. Cerca del 70% de ellos es de origen regional, proviniendo de los países fronterizos un 60% del total y la comunidad peruana es la más numerosa. La legislación chilena sobre extranjeros data de 1951 y es incapaz de responder a los requerimientos que produce el masivo desplazamiento de personas. Esta arista la resalta Carolina Huatay, peruana, periodista y trabajadora social residente en Chile hace 10 años, quien cree que existe falta de criterio político de las autoridades nacionales para resolver el tema del estatus jurídico y el consiguiente respeto a los derechos civiles, sociales de los y las migrantes “que pasan a la categoría de ciudadanos de segunda clase o menos válidos apenas cruzan la frontera. Por contraste, periódicamente, nos llegan noticias de seminarios, documentos y nuevas declaraciones internacionales en que se expresa el respeto a esos mismos migrantes”. A juicio de Huatay, los estados tienen herramientas legales de las cuales echar mano y enfrentar la exclusión y la discriminación que a diario sufren los desplazados, pero “por falta de atención, conciencia o simple interés real, no se aprovechan”. Por eso - dada la precariedad socioeconómica del 70 % de estos trabajadores - la exhortación a las autoridades a pasar “del discurso de la igualdad de derechos” a enfrentar las diferenciaciones con hechos concretos como la aplicación de los artículos 76 y 77 de la Convención Nacional de los Derechos de los Trabajadores Migrantes que ha sido suscrita recientemente por el gobierno chileno .
_ Otra de las normativas que según Huatay “restan dignidad y perjudican a 20 mil inmigrantes en este momento” es la condición de amarre de la visa de residencia a un contrato de trabajo vigente, contraria a las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo que exige su derogación.
Chilenos : ni tan abiertos, ni tan acogedoresLa percepción de las dificultades de la integración por los migrantes a la sociedad chilena es certera y ajustada, de acuerdo a lo expresado por la diputada María Antonieta Saá, quien admitió la rigidez mental de los connacionales “para abrirse a las nuevas realidades sociales ”
La cédula, un problema acucianteLa llegada de desplazados colombianos a Chile, a partir de la asunción del presidente de Colombia, Alvaro Uribe, ha sido de una cuantía menor, pero de un gran impacto, lamentablemente de tipo negativo no solamente para la población sino también para las autoridades que la perciben y evalúan bajo la amenaza de hallarse ante eventuales núcleos de narcotraficantes o guerrilleros.
El asilo y el refugio políticoChile – señala el abogado Roberto Garretón - nunca fue productor de refugiados hasta 1973, cuando por efectos del golpe militar, miles de partidarios del depuesto gobierno del socialista Salvador Allende debieron salir forzadamente a otros países, que les acogieron con generosidad.
Igualmente son necesarios crear un centro de información, orientación y facilitación para los extranjeros y un instituto de altos estudios dedicados a las migraciones; revisar y modernizar los engorrosos procedimientos de tramitación de papeles y en un mundo de sociedades cada vez más globalizadas y cosmopolitas, adherir a la visión de la interculturalidad como estrategia de vida hoy entre los seres humanos. |